¿Está la Covid-19 realmente frenando la industria fotovoltaica?

Hasta un 15% de todos los proyectos de energía renovable en Europa podrían retrasarse o cancelarse debido a la crisis causada por la covid-19, advirtió recientemente la conocida consultora de gestión McKinsey. Los problemas financieros y la reducción de la jornada laboral impidieron que muchas empresas invirtieran en nuevas tecnologías respetuosas con el medio ambiente y en plantas de generación de energía, a pesar de los numerosos paquetes de estímulo económico. La pandemia también tuvo un impacto negativo en los propios mercados energéticos. La caída permanente de los precios de los productos básicos hizo que el uso de las energías convencionales fuera más atractivo y que la expansión de las energías renovables fuera menos popular. Cada vez faltaban más incentivos de inversión para las empresas, ya que los bajos precios de la electricidad reducían la rentabilidad futura de las plantas fotovoltaicas y eólicas. Esto impide que los promotores de proyectos concluyan nuevos acuerdos de compra de energía.

Esta evaluación puede ser correcta, pero solo representa una parte del mercado general. El retraso causado por la covid-19 que se describe en el estudio afecta principalmente a proyectos de tamaño mediano a grande, a menudo con participación suprarregional. Más adelante hablaré de hasta qué punto las actuales restricciones de movimiento están paralizando el sector de las instalaciones que, por lo demás, se caracteriza por la libertad de circulación de trabajadores y empresarios en Europa. Además, las empresas instaladoras de pequeñas plantas suelen trabajar con su propio personal o con trabajadores auxiliares de las inmediaciones del lugar de la construcción por razones de economía.

Por lo tanto, en el ámbito de los sistemas fotovoltaicos de tamaño pequeño y mediano apenas hay pruebas de un impacto negativo de la pandemia hasta el momento. La demanda constantemente alta de módulos de alta eficiencia está causando el estancamiento de los precios. Estos proyectos más pequeños se planifican y ejecutan generalmente por la misma empresa. Si es necesario, el propio maestro de obras se ocupará de ellos si hay escasez de personal. En el mejor de los casos, las demoras en la entrega de los componentes pueden tener un impacto negativo. Los sistemas de almacenamiento de energía en particular ya eran un cuello de botella para las pequeñas plantas solares durante todo el año 2020. Afortunadamente, un sistema fotovoltaico puede ser completado y conectado a la red incluso sin el sistema de almacenamiento previsto. La batería se suministra simplemente más tarde y luego se integra en el sistema preparado.

Sin embargo, la demanda de almacenamiento de energía es ininterrumpida. IHS Markit incluso espera un aumento significativo en las ventas de almacenamiento en todos los sectores este año. En Alemania, actualmente siguen aumentando los sistemas de almacenamiento doméstico, que gozan de una creciente popularidad. Casi se tiene la impresión de que muchos clientes finales no solo se están abasteciendo de alimentos y papel higiénico en tiempos de pandemia y ante la amenaza de un confinamiento, sino que también están tratando de ser más independientes en cuanto a la producción de energía con la ayuda de su propio sistema solar con sistema de almacenamiento. El dinero no invertido en vacaciones se destina a la independencia energética. Esto ha provocado que muchos instaladores tengan la agenda completa de pedidos desde este verano, por lo que difícilmente pueden mantenerse al día con la carga de trabajo.

Además, hay una tendencia a que las empresas del sector de la tecnología ambiental tengan un acceso cada vez más fácil a la financiación de proyectos y empresas mediante el instrumento de la inversión colectiva. Numerosas plataformas ofrecen a las empresas la oportunidad de recaudar fondos en condiciones justas sin necesidad de una costosa ronda de financiación o una oferta pública inicial. Cientos de inversores privados pueden poner a disposición pequeñas cantidades, que luego ganan un interés moderado en los próximos años antes de que los depósitos se devuelvan en el curso de otra ronda de financiación más amplia o de una oferta pública inicial. Por supuesto, siempre existe el riesgo de una pérdida total de los depósitos para el inversor minorista. Este riesgo puede existir hoy en día también si un vuelo de vacaciones se reserva con el proveedor equivocado. Todavía no se ha investigado suficientemente si la mayor disposición a invertir en fondos o crowdinvestments está relacionada con la pandemia y la liquidez que muchas personas tienen por no haberse ido de vacaciones.

Sin embargo, a largo plazo, la industria solar en su conjunto también podría beneficiarse de estos acontecimientos. Debido a la pandemia, las carteras de muchos gobiernos estatales están un poco más sueltas: endeudarse ya no está mal visto. Parte del dinero liberado en el actual presupuesto se destinará ahora a la expansión de las energías renovables. Al parecer, los políticos están estableciendo lentamente la conexión entre la destrucción del medio ambiente causada por la economía nuclear y la basada en los fósiles y el creciente número de desastres naturales y epidemias de virus en todo el mundo. Como resultado de la penetración de los humanos en biotopos previamente intactos, los patógenos del mundo animal que viven allí están entrando en nuestra civilización, cuya existencia ni siquiera habíamos sospechado antes. Cuando estos muten y se extiendan a nosotros los humanos, tendrá lugar la próxima crisis global.

Sin embargo, nosotros en la industria solar podemos considerarnos afortunados de haber escapado apenas con un ojo morado hasta ahora. Restringirnos a los viajes de negocios absolutamente necesarios, trasladar el trabajo de la oficina a la casa y renunciar a las grandes ferias y eventos de interior no nos han hecho demasiado daño. Es posible que la productividad haya aumentado en muchas empresas, pero a menudo los costos han disminuido. La digitalización era imparable incluso antes de la pandemia, así que simplemente nos llegó un poco más de fuerza bruta y más rápido. Cuando la situación general de la crisis se haya calmado un poco después de este otoño e invierno, también podremos esperar con interés a algunos trabajadores nuevos, bien cualificados y motivados de otras industrias que no han sobrevivido tan bien a la crisis económica. Los antiguos empleados de las empresas automovilísticas o de la industria siderúrgica, que están hartos de los trabajos a corto plazo o de los rescates de sus empresas, deberían poner fin pronto a la escasez de trabajadores cualificados en la industria solar. ¡Eso sería una buena noticia por una vez!

Resumen de los puntos de precio en octubre de 2020, desglosado por tecnología, incluidos los cambios en comparación con el mes anterior (a 12.10.2020):