El precio de la luz supera en un 298% la media de un mes de octubre mientras grandes eléctricas retiran las ofertas de generación de sus tecnologías renovables

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Por Grupo ASE

 

El precio diario de la electricidad en el mercado mayorista (POOL) se sitúa en lo que va de octubre (día 19) en 205,93 €/MWh. Sube un 31,9% respecto a septiembre y casi se multiplica por cinco (+463%) en comparación con su nivel de hace un año. Otro dato que aportan los analistas de Grupo ASE, y que muestra lo inusualmente caro que se encuentra, es la media de los últimos cinco años de un mes de octubre, que supera en un 298%.

 

 

 

Generación y demanda de electricidad a la baja

La demanda de electricidad desciende un 2% en la primera quincena de octubre en comparación con el mismo periodo del año pasado. En lo que llevamos de 2021, la demanda solo se ha recuperado un 3%, aún no ha podido recuperar los niveles precovid.

La generación, arrastrada por una débil demanda, cae de forma más acusada, un 2,8%. Han crecido las importaciones, a la vez que se han reducido las exportaciones por una menor producción eólica (-27%) e hidráulica (-35,8%). Para compensar este descenso de la generación renovable (-16,5%), los ciclos combinados de gas han aumentado su producción un 18,7%, lo que conlleva altos precios en el POOL.

 

Polémica reducción de la eólica

Algunas grandes eléctricas han anunciado una retirada de las ofertas de generación de sus tecnologías renovables, argumentando que la nueva normativa confisca los beneficios de estas tecnologías y les hace entrar en pérdidas.

Sin embargo, esta situación ya se venía dando en los últimos meses. Los analistas de Grupo ASE han llamado la atención sobre este hecho en sus informes. Desde junio, hay una retirada de la producción eólica en las horas centrales del día. Esta circunstancia ‘evita’ que, en determinados momentos y días, se produzca un hundimiento del precio del POOL.

 

La producción eólica media horaria se mantuvo estable en octubre de 2020, incluso creciente en las horas centrales. Pero en octubre de 2021 se reduce en las horas centrales.

 

El temor a un frío extremo dispara la demanda de gas y sube la electricidad

Planea el riesgo de una ola de frío este invierno. La preocupación que genera está impulsando los precios. Aunque el nivel de almacenamiento europeo es más bajo que otros años, sería suficiente para hacer frente a un invierno tan frío como el de 2020.

En estas primeras semanas de octubre tanto las temperaturas como las previsiones se mantienen muy suaves. Por otra parte, el suministro nuclear francés, clave en la oferta energética europea, está siendo elevado y durante el invierno se mantendrá un 9% por encima de la media de 2016-2020. También se espera un aumento de la oferta renovable.

Europa registra desde septiembre la oferta de suministro de gas más baja desde 2016, condicionada por la caída de flujos rusos y las obras de mantenimiento noruego. El aporte noruego espera recuperarse para el invierno, pero la feroz competencia entre Europa y Asia seguirá siendo crucial. Solo unas temperaturas más cálidas frenarían el impacto de la creciente demanda china.

El mercado diario de referencia en Europa, el TTF holandés, marcó máximo histórico (115,95 €/MWh) el 5 de octubre y su precio medio de la primera quincena se sitúa en 89,65 €/MWh, un 773% más elevado que hace un año. Los productos de futuros también suben con rotundidad y el mes de noviembre cotiza sobre los 100 €/MWh.

 

Dificultad para la industria

La actividad económica podría estar ralentizándose después del fuerte crecimiento registrado en primavera. Lo confirman los índices de Consumo de Grupo ASE (Índice ASE CTEI), que monitorizan a más de 900 empresas. Su crecimiento en el tercer trimestre apenas ha alcanzado el 0,86%, frente al 5,84% que sumó en primavera (segundo trimestre).

La caída de los precios energéticos de esta crisis vendrá precedida por un descenso de la demanda, por lo que podríamos estar ante una primera señal de agotamiento de esta subida. Otro factor clave será la climatología, que puede mejorar o empeorar la situación.

Las grandes eléctricas están cancelando contratos con coberturas antes de su vencimiento, mientras los pequeños comercializadores no pueden ofertar precios estables porque tienen que cubrir enormes garantías, dada la magnitud de la escalada.

Está por ver el efecto de las subastas que el Ministerio quiere “obligar” a realizar a las grandes eléctricas, sobre el 25% de su generación renovable. De hecho, la CNMV ya advirtió en un informe de la escasa oferta que existe en España de coberturas a largo plazo para la industria, en comparación con otros países. Señalaba a las grandes eléctricas, que utilizan su generación y su posición de dominio para cubrir las posiciones de sus comercializadoras.

Por tanto, de momento la industria está abocada a trasladar sus mayores costes energéticos al precio de sus productos finales, con el riesgo de perder competitividad. Aunque este efecto es global.

 

 

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