Una nueva herramienta permite identificar las zonas en las que pueden producirse renovables y combustibles sintéticos de forma rentable, en las que podrían construirse centros de hidrógeno y en las que es necesario ampliar la red.
Científicos noruegos han conseguido hacer funcionar una microturbina de gas con hidrógeno puro. Afirman que su experimento allana el camino para el uso de la infraestructura existente para generar calor y energía con el combustible verde.
Un estudio realizado entre más de mil profesionales de 53 países revela que casi un 88% de las empresas y organizaciones del sector del hidrógeno verde espera una mayor demanda de ingenieros y químicos con experiencia en hidrógeno.
La japonesa Rinnai ha presentado lo que, según ella, es la primera tecnología de combustión de hidrógeno al 100% para calentadores de agua residenciales. Antes de su comercialización, está a prueba en proyectos en Australia.
Contará con una parte de agrovoltaica, una instalación de almacenamiento de hidrógeno sólido para sus propias necesidades de electricidad, así como estaciones de carga rápida para coches y bicicletas; y considera la posibilidad de incluir electrolizadores para la producción de hidrógeno verde.
Unos investigadores alemanes han construido placas bipolares para pilas de electrolizadores sin utilizar titanio, lo que, según afirman, puede reducir aún más los costes del hidrógeno ecológico.
China lidera la lista, seguida de Chile, Marruecos, Colombia y Australia. Los chinos podrían llegar a un coste de solo 0,65 dólares el kilo, mientras que España llegaría a los 0,80 dólares.
El consorcio HyDeal ficha a las empresas de ingeniería para diseñar y ejecutar su plan de inversiones de 7.000 millones de euros en el norte de España. Se espera que el inicio de la producción ocurra a finales de 2025.
AIMPLAS trabaja en varios programas para mejorar el rendimiento de las baterías eléctricas y las pilas de hidrógeno. Además, investigan la protección frente a incendios de los sistemas de almacenamiento mediante materiales plásticos ignífugos.
Estará diseñado para circular a una velocidad máxima de 220 km/h en modo eléctrico y de 160 km/h en modo hidrógeno. La pila de hidrógeno consumirá tan solo 0,25 kg/km y dará al tren una autonomía de 800 km sin electrificación.
Este sitio web utiliza cookies para contar anónimamente los números de visitantes. Para obtener más información, consulte nuestra Política de protección de datos.
The cookie settings on this website are set to "allow cookies" to give you the best browsing experience possible. If you continue to use this website without changing your cookie settings or you click "Accept" below then you are consenting to this.