Los proyectos fotovoltaicos se amortizan en menos de un año en algunos países y el almacenamiento se multiplicará por 15 en 2030

Los precios récord que está viviendo la energía, sobre todo en Europa, están acelerando la inversión en proyectos solares y eólicos: estas han aumentado de forma significativa y se prevé que alcancen los 494.000 millones de dólares en 2022, y que superen por primera vez las inversiones en petróleo y gas, con 446.000 millones de dólares para ese año, según la consultora noruega Rystad Energy. Es la primera vez que la inversión en energías renovables va a ser mayor que la del petróleo y el gas.

En general, la rentabilidad de instalaciones fotovoltaicas y eólicas se ha basado principalmente en las subvenciones para que los proyectos salieran adelante, a pesar de que hace años que se alcanzó la paridad de red (en concreto, a finales de 2020 toda Europa occidental, gran parte de EE UU, China, la India, Australia y Brasil, por citar solo a los más grandes, se encontraban en situación de paridad de red).

A pesar de que el aumento de costes debido a los recientes problemas de las materias primas y la cadena de suministro deberían haber empeorado las cosas, el análisis de Rystad Energy demuestra que los actuales precios del mercado spot en Alemania, Francia, Italia y el Reino Unido conllevan que los proyectos se amorticen en 12 meses o incluso menos.

Como ejemplo, se ha tomado un proyecto solar de 250 MW en Alemania. Partiendo de un precio de la electricidad a largo plazo de 50 euros/MWh, la rentabilidad esperada después de impuestos es de aproximadamente el 6% con un periodo de amortización de 11 años, calcula Rystad. Pero un precio de 350 euros/MWh da lugar a un periodo de amortización de solo un año, mientras que un precio de aproximadamente 180 euros –el umbral de precio propuesto por la Comisión Europea– reduce la amortización a cinco o seis años.

BNEF revisa al alza el almacenamiento

Las últimas previsiones de la consultora BloombergNEF (BNEF) prevén que el mercado mundial de almacenamiento de energía alcance los 411 GW (o 1.194 GWh) a finales de 2030, según Esta cifra es 15 veces superior a los 27 GW/56 GWh de almacenamiento que había en línea a finales de 2021.

El informe de BNEF Energy Storage Market Outlook del segundo semestre de 2022 prevé un aumento del 13% de la capacidad para 2030 respecto a las estimaciones anteriores, debido principalmente a la reciente evolución de las políticas. Esto equivale a 46 GW/145 GWh adicionales.

Las políticas que más influencia están teniendo en el sector son, según BNEF, la Ley de Reducción de la Inflación de Estados Unidos –que proporciona más de 369.000 millones de dólares de financiación para las tecnologías limpias–, y el plan REPowerEU de la Unión Europea, que contará con 300.000 millones de euros de financiación de la UE, y prohibirá de facto el 90% de las importaciones de petróleo ruso a la Unión Europea para finales de año. Además, se mejorarán las interconexiones y se invertirá más en renovables..

Se calcula que entre 2022 y 2030 se añadirán 387 GW/1.143 GWh de nueva capacidad de almacenamiento de energía en todo el mundo. Estados Unidos y China seguirán siendo los dos mayores mercados, y representarán más de la mitad de las instalaciones de almacenamiento mundiales para el final de la década. Europa, además, “se está poniendo al día”, según la consultora.

BNEF prevé que el 61% de los proyectos de energía que se construyan en 2030 será para adelantar o retrasar el momento del despacho de electricidad. Pero también se espera que las baterías de autoconsumo residencial y comerciales e industriales crezcan a un ritmo constante y representen alrededor de una cuarta parte de las instalaciones de almacenamiento a nivel mundial en 2030.