Romper el “sesgo del statu quo” con centrales solares codiseñadas

Share

Un estudio realizado por un grupo de investigadores de los Países Bajos ha descubierto que la participación y las aportaciones de los interesados locales en el desarrollo de centrales solares pueden tener una notable influencia positiva en la aceptación local de las instalaciones.

El equipo evaluó cómo el “sesgo del statu quo” -cuando la gente se resiste a cualquier cambio en su entorno- es potencialmente la principal barrera para la transición a las energías limpias y cómo los proyectos de plantas fotovoltaicas pueden superar ese sesgo, que no suele basarse en fundamentos científicos o técnicos.

“El enfoque actual para desarrollar proyectos de energías renovables se enfrenta a menudo a la oposición local y se ha dicho que aumenta la injusticia”, subrayaron los investigadores. “Una forma de abordar la justicia procesal es incluir a los interesados locales en el proceso de diseño. Sin embargo, puede resultar difícil para el público lego comprender las complejidades técnicas de las centrales solares.”

Para contrarrestar la resistencia de los ciudadanos locales con actitud “Not in My Back Yard” (NIMBY), el estudio se basó en los resultados de un proyecto de investigación llamado “In My Backyard Please”. Para el nuevo estudio, la selección de un proyecto de caso de uso tuvo en cuenta siete factores: ubicación en los Países Bajos, relevancia, oportunidades de diseño, experiencia paisajística del usuario, posible resistencia local, fase de desarrollo y voluntad de cooperación de las partes interesadas locales.

En consulta con los socios del proyecto, los investigadores seleccionaron un caso de uso en Nauerna, en el norte de los Países Bajos, que, según afirman, “mostraba potencial debido a la presencia de una comunidad comprometida que, por un lado, quería trabajar en una planta de energía solar, pero que, por otro, mostraba algunos signos de resistencia a la transformación del paisaje”.

Realizaron entrevistas para calibrar el “nivel de apego al lugar” de los interesados locales y luego llevaron a cabo un análisis del paisaje para cartografiar el potencial energético de la zona. En marzo de 2020 se organizaron dos sesiones de codiseño y se invitó a los participantes a compartir sus propias ideas sobre cómo se diseñaría la instalación solar.

A continuación, los socios del proyecto utilizaron estas ideas para desarrollar tres conceptos de diseño y crear un prototipo a escala real que mostraba diferentes opciones de construcción en el emplazamiento de un vertedero. A continuación, los investigadores entrevistaron a 21 habitantes de los 92 hogares residentes para evaluar no sólo los comentarios sobre el prototipo, sino también el posible cambio en las actitudes de la comunidad y su apoyo al desarrollo de la planta solar, junto con “el valor de utilizar un prototipo a escala real para visualizar las ideas de diseño en el contexto de un proceso de diseño participativo”.

“La mayoría de los participantes (85,7%) declaró que el prototipo a escala real les proporcionó más información sobre el impacto y las posibilidades de diseño de una planta solar en la ubicación seleccionada”, señala el estudio, apuntando que el 81% de los participantes dijo que “el prototipo influyó positivamente en sus opiniones”, y el mismo porcentaje respondió afirmativamente a una pregunta sobre la construcción de la planta solar en su proximidad.

Los académicos señalaron que sus conclusiones demuestran la importancia de la participación de las partes interesadas locales en una fase temprana del proceso para conseguir la aceptación del desarrollo de proyectos de centrales solares. Los diseñadores deben tener en cuenta los prejuicios sobre el statu quo a la hora de diseñar las centrales.

Sin embargo, el estudio también descubrió que los habitantes que tendrían una visión directa del proyecto tendían a responder más negativamente al diseño. Aquellos que tendrían una vista directa del emplazamiento desde sus salones respondieron negativamente cuando se les preguntó si querrían que el proyecto se construyera en su patio trasero.

Los resultados de la investigación están disponibles en el documento “Seeing is believing, experiencing is knowing: The influence of a co-designed prototype solar power plant on local acceptance” (Ver para creer, experimentar para saber: La influencia de un prototipo de central solar codiseñado en la aceptación local), publicado en Solar Energy. Entre los autores figuran investigadores de la Universidad e Investigación de Wageningen, y el proyecto contó con financiación del Rijksdienst voor Ondernemend Nederland (RVO) neerlandés, dentro del programa TKI Urban Energy.

“Nuestros resultados sugieren que el compromiso local con el desarrollo y el apoyo a una central solar puede verse reforzado por las ‘posibilidades de participar’, la oportunidad de ‘influir en los resultados’ y de codiseñar una central solar que tenga en cuenta los deseos de las comunidades locales”, concluyen los académicos.

Este contenido está protegido por derechos de autor y no se puede reutilizar. Si desea cooperar con nosotros y desea reutilizar parte de nuestro contenido, contacte: editors@pv-magazine.com.