Como parte de un proyecto de comunidad energética, instalan paneles en el puerto de Barcelona

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En un comunicado, se explica que se han ubicado placas fotovoltaicas -desarrolladas por el fabricante alemán Heliatek- sobre las casetas, cuyos techos de medio punto no admiten placas fotovoltaicas tradicionales, tanto por la forma de la cubierta como por el exceso de peso de una instalación estándar.

Así, los paneles, de materiales orgánicos, muy ligeros y flexibles, se adaptan a la ondulación de la cubierta del edificio hasta completar una potencia de 29,5 kWp. Se estima que anualmente puede generar 43,4 MWh, cerca del 5% del consumo total del muelle de Pescadores y un 11% del consumo de la fábrica de hielo.

Se especifica que la actuación, enmarcada dentro del proyecto europeo LIFE BIPV (Building-integrated Photovoltaics), coordinado por COMSA Corporación y cofinanciado por el programa europeo LIFE, es el paso inicial de la primera comunidad energética del puerto de Barcelona.

“La futura comunidad energética consistirá en interconectar la electricidad renovable generada por islas fotovoltaicas situadas en tres espacios del muelle, cada uno de ellos asociado a una fase del proyecto: el patio de redes, donde se encuentran las casetas (fase 1), la lonja de la Cofradía de Pescadores (fase 2) y el tinglado de redes (fase 3)”, se describe en el comunicado.

Una pérgola con módulos fotovoltaicos en el patio de redes y la instalación en curso de baterías de 45 kWh de capacidad para almacenar los excedentes de producción fotovoltaica son las próximas actuaciones.

En ese sentido, el puerto de Barcelona, junto con la planta de acero de Jesenice (Eslovenia), el parque industrial del Temse (Bélgica) y una instalación en el municipio de Tartu (Estonia), forma parte del proyecto piloto Creators, un programa de desarrollo de comunidades energéticas locales en Europa con financiación Horizon 2020.

Se menciona que la experiencia obtenida dentro del proyecto Creators permitirá escalar la iniciativa a todo el ámbito portuario, razón por la cual se están estudiando “los consumos de todos los concesionarios y el potencial de producción fotovoltaica en las cubiertas de todos los edificios del recinto portuario”. El objetivo es el aprovechamiento máximo de la producción renovable en el ámbito portuario.

Junto con actuaciones como la electrificación de los muelles (el proyecto Nexigen) o la producción de combustibles verdes, se espera alcanzar objetivos de reducción de gases de efecto de invernadero del 50% en el 2030 y del 100% en el 2050.

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