La Fundación Galp y Galp Solar apuestan por la educación y premian a una escuela de Lisboa con 20.000 € para la instalación de paneles solares

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El colegio D. Francisco Manuel de Melo, situado en Amadora (Lisboa, Portugal), ha sido el gran ganador de la edición 2022 de los Premios Energy Up, un concurso organizado por la Fundación Galp y Galp Solar, que distingue los proyectos escolares más destacados en el fomento del consumo eficiente de energía y en el ámbito de la movilidad sostenible. Con este triunfo, el colegio de Amadora ha ganado una instalación de paneles solares valorada en hasta 20.000 euros. Una iniciativa que se encuadra dentro del plan de innovación social de Galp Solar, con el objetivo de acelerar la transición energética en la sociedad.

La ceremonia de entrega de los premios de esta segunda edición ha contado con más de 50 solicitudes de colegios de 13 distritos de Portugal y del Archipiélago de Madeira. Con iniciativas como la construcción de prototipos solares fotovoltaicos (automóviles y hornos solares), el colegio de Amadora busca desarrollar y estimular las habilidades empresariales en sus estudiantes a lo largo de los años, centrándose en las preocupaciones ambientales. Este año, además, también se ha desafiado a los estudiantes a resolver problemas complejos y futuros, utilizando herramientas como el pensamiento de diseño.

El jurado, compuesto por representantes de Quercus, APA, ADENE, DGEG, DGE, Galp Solar y el media partnerDinheiro Vivo, también destacó – entre los diversos méritos de este proyecto – su continuidad y evolución a lo largo de los años y el hecho de que acerque a los estudiantes a la realidad empresarial, ya sea a través de soluciones innovadoras o de la creación de una empresa para el año 2050, en el contexto de una ciudad sostenible, con retos energéticos y de movilidad.

En el resto de las categorías de la presente edición de los Premios Energy Up – las victorias de primer ciclo; segundo y tercer ciclo; y educación secundaria o profesional fueron para los respectivos colegios de Póvoa de Varzim, Castelo Branco y Santo Tirso, ganaron un premio de 1.000 euros cada uno para financiar sus proyectos educativos.

En la categoría de educación secundaria o profesional, el Instituto Nun’Alvres, en Santo Tirso, fue galardonado con el proyecto multidisciplinario “Luz Verde” que, a través de la instalación de un dispositivo, regula de forma automática y remota la intensidad luminosa de una habitación. El proyecto – cuyo prototipo está en uso en el pabellón polideportivo y en otra estructura con aula – contempla la entrada de luz solar (a través de persianas) con la regulación de la intensidad de la luz eléctrica (con lámparas regulables), solucionando así la dificultad de ajustar una intensidad lumínica de forma simultánea, cómoda y energéticamente eficiente.

En la categoría de segundo y tercer ciclo, el jurado otorgó el premio a la Escuela Cidade de Castelo Branco por el proyecto multidisciplinario “Escuela + Respetuosa con el medio ambiente“. Centrado en el uso eficiente de la energía, el proyecto busca concienciar sobre la importancia de reducir los viajes en coche privado y reducir el consumo de energía, así como mejorar la calidad de vida de la población. El proyecto también promueve el uso de un depósito de gas para el almacenamiento de agua de lluvia y utiliza energía fotovoltaica para bombear agua para el riego de los jardines y el huerto escolar.

En la categoría del primer ciclo, la Escuela Básica de Aver-o-Mar, de Póvoa de Varzim, fue la ganadora con el proyecto multidisciplinario “Aver-o-Eco”, que moviliza y sensibiliza a la comunidad escolar y sus alrededores en materia de movilidad sostenible. El jurado ha premiado el enfoque de esta escuela, en materia de Educación y Seguridad Vial, que ha incrementado su parque de bicicletas y fomenta constantemente su uso, contribuyendo a reducir los gases de efecto invernadero.

Esta es la segunda edición de los premios escolares Energy Up de la Fundación Galp. El “Gran Premio” del año pasado fue para el grupo escolar Gafanha da Nazaré, con el proyecto SmartAir, centrado en concienciar sobre la reanudación del uso de bicicletas o vehículos eléctricos. El concepto incluyó el diagnóstico de las condiciones de movilidad en la ciudad y campañas de sensibilización para mejorar el acceso al uso de medios limpios de locomoción.

Desde 2010, la Fundación Galp ha llegado – con sus proyectos educativos – a más de 2 millones de estudiantes y docentes en más de 17.000 colegios, invirtiendo en educación como base del éxito para la construcción de un futuro mejor. El Premio Energy Up, desarrollado en conjunto con Galp Solar, Quercus, APA, ADENE, DGEG y DGE , se otorgó por primera vez en 2021 bajo el programa Future Up, que anima a niños y jóvenes, profesores, voluntarios y socios a tener un impacto positivo en la sociedad, con nuevas ideas y soluciones. También, distingue proyectos escolares innovadores, sostenibles e inspiradores, en línea con el compromiso de Galp de acelerar los esfuerzos para la transición energética y movilizar y empoderar a las comunidades a lo largo de este camino.