La columna de UNEF: La fotovoltaica, una vía para el desarrollo rural

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Como ya viene siendo habitual en esta tribuna, vamos a desmontar otro de los grandes mitos del sector fotovoltaico. En esta ocasión toca la percepción, tristemente extendida, que apunta que, por su uso de terreno, nuestra tecnología es una amenaza para la agricultura y la ganadería.

Según el Ministerio de Agricultura, España cuenta con 23,7 millones de hectáreas (Mha) de superficie agroganadera repartidas entre cultivo (16,7 Mha) y pasto (7,1 Mha)[1], datos que hacen de nuestro país el segundo de la UE en términos absolutos[2]. Además, España destaca también en porcentaje respecto al total: un 46,2% de nuestra superficie es terreno agrícola o ganadero, siete puntos por encima de la media de la UE.

Ahora que está claro el punto de partida, podemos hablar del futuro. Para ello, cuantificaremos el terreno necesario para las instalaciones fotovoltaicas contempladas en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC). El PNIEC pretende llegar a 39 GW de capacidad FV en 2030, frente a 10 GW a cierre de agosto 2020: 29 GW de nueva fotovoltaica hasta 2030. La cuestión es: ¿cuánto ocupa esto?

Con un uso de terreno medio de 2 ha/MW, el resultado de esta nueva capacidad son 58 mil hectáreas.[3] Si lo comparamos con los datos anteriores de terreno agroganadero (16,7 Mha de cultivos y 7,1 Mha de pastos) ya vemos que estos son varios órdenes de magnitud superiores. Tanto es así que, si toda la capacidad fotovoltaica se desarrollase en terreno agroganadero, se ocuparía solo un 0,25% de éste y el porcentaje de terreno agroganaderosobre el total se reduciría solo -0,1 pp: de 46,2% se pasaría a un 46,1%.

Si hacemos este mismo análisis por CCAA (distribuyendo la capacidad FV a instalar proporcionalmente a los permisos de acceso a la red concedidos), el resultado es que solo la Comunidad de Madrid superaría una afección del 1%.

Figura 5 Estimación de la ocupación del terreno de cultivos (%) por CCAA resultado de la capacidad prevista en el PNIEC. Fuente: Elaboración propia UNEF

Queda claro entonces que el uso de tierra de las instalaciones de generación fotovoltaicas no supone una amenaza para la disponibilidad de terreno agrícola. Dicho esto, desde UNEF siempre hemos mantenido que debe priorizarse el desarrollo fotovoltaico en zonas desnaturalizadas y hemos solicitado a la administración una zonificación que las identifique.

También defendemos por supuesto el autoconsumo. Para nosotros es un pilar esencial del modelo energético, pero si queremos cumplir con los objetivos de reducción de emisiones, no podemos prescindir de las plantas en suelo. En lugar de descartarlas, entendemos que estas instalaciones deben construirse bajo criterios exigentes de respeto al entorno ambiental, como apuntamos en nuestras ‘Recomendaciones para la sostenibilidad ambiental de las instalaciones fotovoltaicas’.

Asimismo, desde UNEF venimos reclamando desde hace años el desarrollo de las comunidades energéticas renovables. Esta figura, que fue introducida en la Ley del Sector Eléctrico recientemente, debe desarrollarse regulatoriamente para permitir la participación local en proyectos renovables, aumentando la implicación y la contribución de la ciudadanía en la transición energética.

En todo caso, las instalaciones fotovoltaicas dejan un considerable impacto positivo en los lugares en los que se instalan. Estos proyectos contribuyen a generar empleo y permiten a las entidades locales a fijar población y recaudar impuestos para mejorar sus dotaciones municipales.

Si, guiándonos por la percepción amplificada de quien no hace caso a la evidencia, cercenamos la posibilidad de desarrollo para el mundo rural que suponen las energías renovables, no estamos ayudando a los pueblos, todo lo contrario. En su lugar, estamos dejando a estas zonas ancladas en un modelo económico dependiente del sector primario y eliminando una vía de ingresos a los ayuntamientos que serviría para mejorar las condiciones de vida de los habitantes de la España rural.

 

[1] Datos del Anuario estadístico del Ministerio correspondientes a 2018. Enlace.

[2] Datos de ‘Farms and farmland in the European Union – statistics’ correspondientes a 2016. Enlace.

[3] Implícitamente se está tomando una hipótesis desfavorable: que la capacidad objetivo del PNIEC para fotovoltaica no incluye el autoconsumo.

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