La crisis impulsó fuertemente la internacionalización de esta y muchas otras empresas del sector. Sin embargo, si en los años duros fueron sus filiales en Brasil y Chile las que asumieron el protagonismo, hoy buena parte de los nuevos contratos vuelven a provenir de España. Y esto, en una empresa intensiva en ingenieros especialistas, se traduce en un mayor empleo para sus oficinas centrales en Madrid.
Sólida inició su andadura en 2007. Desde entonces acumula ya más de 40.000 MW de experiencia en más de 50 países, tanto en proyectos eólicos, fotovoltaicos, termosolares o de biomasa, como en sus infraestructuras eléctricas de evacuación.
“Hemos cerrado acuerdos marco de colaboración con clientes muy importantes que confían en nosotros; pero además, hemos podido ampliar nuestra cartera con nuevos players con gran apetito en el mercado”, afirma Andrés Medina, Director de Desarrollo de Negocio de Sólida Energías Renovables.
La empresa actúa como partner técnico de los principales promotores, EPCistas y sponsors. Actualmente, se encuentra involucrada en proyectos emblemáticos como Noor Midelt, en Marruecos (el primer complejo híbrido que combina las tecnologías termosolar y fotovoltaica), o Núñez de Balboa, en Badajoz, que se convertirá a priori en la mayor planta fotovoltaica de España y de Europa, con 500 MW.
“En un momento como este, en el que las ingenierías tenemos que simultanear numerosos proyectos en diferentes geografías, con plazos cada vez más apretados y precios extremamente agresivos, desarrollar herramientas propias que optimicen procesos y mejoren la eficiencia son la clave de la ventaja competitiva”, añade Andrés Medina.
