Con el Día Mundial del Ahorro (31.10) a la vuelta de la esquina y la llegada inminente del frio invierno, muchos españoles buscan maneras de combatir la bajada de las temperaturas sin que la factura energética se dispare. En este contexto, la aerotermia se presenta como una fuente de energía alternativa eficiente y sostenible a los sistemas de calefacción tradicionales.
Beneficios para el bolsillo y el medio ambiente
La aerotermia destaca por su eficiencia energética, lo que se traduce en un importante ahorro económico a largo plazo. Combinada con placas solares y baterías, puede llegar a reducir las facturas de luz y gas hasta en un 90% en comparación con sistemas que utilizan gas, suponiendo un ahorro de hasta 4.000€ anuales, para una vivienda unifamiliar, frente a otras fuentes de energía como el carbón. Además, al utilizar una fuente de energía renovable como el aire, la aerotermia reduce la dependencia de los combustibles fósiles y minimiza el impacto ambiental, puede reducir el consumo energético hasta en un 70% en comparación con sistemas de calefacción tradicionales como el gas natural o el gasóleo.
Si bien se asocia a menudo con la refrigeración durante las olas de calor estivales, la aerotermia es un sistema de climatización muy versátil que proporciona confort térmico durante todo el año.
Este sistema, basado en bombas de calor que extraen energía del aire exterior, permite calentar el hogar de forma eficiente incluso en los meses más fríos. Además de proporcionar calefacción mediante suelo radiante, radiadores o fancoils, la aerotermia también produce agua caliente sanitaria, cubriendo así las necesidades básicas del hogar.
Superando las barreras de desconocimiento e inversión
A pesar de sus ventajas, aún existen ciertas reticencias hacia la aerotermia, según el reciente InformeSolar de SotySolar, si bien a uno de cada tres propietarios españoles le interesa esta tecnología, el 50% la considera cara. Por ello, en el mercado hay planes de financiación flexibles, como por ejemplo los de SotySolar que van desde 93€ al mes. Para una vivienda unifamiliar, la inversión inicial ronda los 10.000€, y se amortiza entre los 5 y 10 años debido a los ahorros mensuales en energía. Aunque si bien la aerotermia ofrece una excelente eficiencia energética, su rentabilidad se destaca más en viviendas grandes o bien aisladas que en las pequeñas, donde la inversión inicial puede no verse compensada por el ahorro energético potencial.
Para las viviendas de menos de 90m2, una de las mejores opciones para generar ahorros significativos en la factura de la luz es la instalación de paneles solares, que pueden aportar reducciones que oscilan entre un 40- 80% del coste de la energía. Este ahorro comienza a ser evidente inmediatamente después de la instalación y se mantiene durante la vida útil de los paneles, que suele ser de 25 a 30 años.
Aunque la energía solar se asociaba tradicionalmente con viviendas grandes, los avances tecnológicos han democratizado su acceso, permitiendo la implementación en pisos y espacios reducidos. Opciones como el autoconsumo compartido y las comunidades energéticas ofrecen a los residentes la posibilidad de aprovechar los beneficios de la energía solar.